Universidad de Salamanca
El rey de León, Alfonso IX, en el año 1218, permitió que se crearan las ‘scholas Salamanticae’ en la ciudad de Salamanca. Más tarde, mediante real cédula, fechada el 9 de noviembre de 1252, Alfonso X el sabio, rey de Castilla y León, la convirtió en la primera institución educativa europea en obtener el título propiamente de universidad. Fue ratificada en el año 1255 por la licentia ubique docendi del papa Alejandro IV, aprobando de esta manera su creación y concediéndole sello propio.
Según el decreto de 1254, en el que se establecieron las normas de
organización y financiación, quedó también establecida la docencia,
compuesta por: un maestro en leyes, otro en decretos, dos de
decretales, dos de lógica, dos de gramática, dos de física o medicina,
uno de órgano, un apotecario, un bibliotecario y dos conservadores.
En la universidad de Salamanca se formaron la gran mayoría del elenco de sabios y eruditos que recorrieron todo el ámbito cultural entre los siglos XV y XVIII, primero en la península Ibérica y más tarde en los territorios de las Indias, en donde, la creación de las universidades americanas, que a partir de 1551 comienzan a fundarse, tienen como ejemplo la universidad de Salamanca.
Por sus aulas han pasado muchos personajes ilustres como el poeta y humanista Fray Luis de León, el músico Francisco de Salinas o Antonio de Nebrija, creador de la primera gramática del español.
Los grandes problemas que se plantearon con el descubrimiento de América a partir de finales del siglo XV en todos los órdenes de la vida, económicos, morales y jurídicos, se discutieron en esa universidad por hombres de iglesia. Primero fueron dominicos y posteriormente, jesuitas; nombres ilustres como Francisco de Vitoria, Domingo de Soto, Luis de Alcalá, Martín de Azpilicueta, Tomás de Mercado o Francisco Suárez, todos ellos iusnaturalistas y moralistas, fundaron una escuela de teólogos y juristas que realizó la tarea de reconciliar la doctrina tomista con el nuevo orden social y económico.
Pero no fue solo humanista su configuración como universidad, en Salamanca se originó y se confeccionó el Calendario Gregoriano, a partir de un primer intento realizado en 1515 por sus científicos y astrólogos,
quienes concluyeron un segundo estudio, fechado en 1578, que obtendría la implantación mundial
que aún permanece por su excelencia.
Un mérito silenciado y atribuido otros...
La universidad ha seguido viva a través de los siglos, a pesar de que haya tenido momentos de zozobra, como los años de la invasión francesa de España, entre los años 1808–1813, que fue nefasta para la ciudad de Salamanca y su universidad; muchos de los edificios de los Colegios salmantinos resultaron destruidos en el transcurso de las batallas. Lo que quedaba de sus bibliotecas (parte de ellas había sido trasladada al Palacio Real al ser cerrados los Colegios en 1780) fue expoliado. Esos libros se recuperaron entre el equipaje del rey José I, hermano de Napoleón, tras la batalla de Vitoria (1813). Una parte de ellos fue regalada por Fernando VII a los británicos como agradecimiento por su «ayuda», y otra pasó a formar parte de la Biblioteca del Palacio Real. Parte de estos últimos fue recuperada para la Biblioteca de la Universidad de Salamanca en 1954.
Lecturas recomendadas