Ciudad Trujillo -Francisco De las Casas-
Francisco de las Casas, en marzo de 1525, según cuenta Bernal Díaz del Castillo, “púsole aquel nombre porque era natural del Trujillo de Extremadura [...]”.
El 18 de mayo de 1525 el conquistador español Juan de Medina fundaba en nombre de Francisco de las Casas, enviado por Hernán Cortés, la ciudad de Trujillo que, tras algunos traslados y refundaciones, se ubicó definitivamente en la Punta de Casinas, lugar visitado y denominado así por Colón en agosto de 1502 durante su cuarto y último viaje.
Era la primera vez que el almirante tocaba tierra en América Central. Como notó que en este sitio el agua era muy profunda, según cuentan, lo llamó Golfo de Honduras.
Francisco De las Casas, quien está considerado el fundador de la ciudad de Trujillo, era natural del pueblo del mismo nombre en la provincia de Cáceres, Extremadura. Se desconocen la fecha de su nacimiento y el momento en que pasó a las Indias, pero, en 1523, desde la isla de Cuba navegaba hasta la Villa Rica De la Vera Cruz para ponerse a las órdenes de Hernán Cortés, de quien, al parecer, era pariente.
Terminada la conquista de Tenochtilan, Cortés nombró a De las Casas su teniente de gobernador y le encomendó partir para las Hibueras con el fin de someter a Cristobal de Olid que, enviado por el mismo Cortés para crear un asentamiento en aquellas tierras, pretendía rebelarse contra él. Partió De las Casas para cumplir las órdenes recibidas, pero fue apresado por Cristobal de Olid junto a Gil González Dávila que acababa de llegar a la zona como gobernador del golfo Dulce. Ambos presos fueron sacados del calabozo por Olid para cenar juntos, pues eran amigos y, de esta forma los dos presos consiguieron reducirle, apresarle y, tras un breve juicio, ajusticiarle por traición a la Corona.
En la ciudad de Trujillo, situada en la costa norte de la actual Honduras, se constituyeron los primeros asentamientos españoles en Centroamérica y una de las principales ciudades de la región debido a su puerto natural, que fue declarado como el más importante de Honduras. Desde allí partían y llegaban mercancías de la península hasta la Nueva España. El que es considerado su fundador, Francisco de las Casas permaneció en Trujillo durante algún tiempo al frente de la gobernación del norte de Honduras, pero no tardó en regresar a México, donde fue nombrado teniente de gobernador y alcalde mayor. Al parecer, padeció un contencioso con los oficiales reales, por lo que fue enviado preso a España. Sin embargo, debió de resultar inocente, pues, en 1527, se le encuentra residiendo en México y ubicado entre la elite local.
Trujillo fue uno de los primeros reductos españoles en la costa oriental de Honduras, convirtiéndose en un punto estratégico en la costa caribeña, facilitando el comercio y la exploración hacia el interior del continente.
Pocos años después de la fundación de la ciudad, el emperador Carlos V le concedía su escudo de armas.
Sin embargo, la villa se pobló con escasa población y con una deficiente infraestructura por lo que pronto, al papel político-administrativo que desempeñaba se agregó el defensivo, debido a la aparición de piratas extranjeros desde la década de 1540 y, poco a poco, fueron apareciendo colonos ingleses en las costas e islas que hicieron de la provincia de Honduras un foco de permanente confrontación; particularmente en sus puertos e islas.
Los piratas llegaban atraídos por la riqueza de las islas y los puertos localizados en la región, desde donde salían buenas cantidades de metales preciosos, procedentes de los alrededores de Trujillo.
Los primeros ataques al puerto datan de 1543, momento en que la villa de Trujillo fue saqueada por un capitán de nombre Jackson.
En 1550 se construyó la fortaleza defensiva de Santa Bárbara para consolidar su defensa, pero en 1558 fue saqueado por piratas franceses, quienes incendiaron la Iglesia y el pueblo. Después, entre 1560 y 1576 este lugar fue saqueado y quemado en tres ocasiones. En 1603 fue asediado por el pirata Pie de Palo y Diego el mulato. En el siglo XVII, Trujillo sufrió numerosos ataques de piratas, lo que llevó a su declive temporal. El famoso pirata Henry Morgan atacó la ciudad en 1671.
Fuentes: Estudios sobre la ciudad de Trujillo
Fuentes: RAH. Francisco De las Casas