Fray Antonio de Remesal
Llegó a Guatemala en 1614. Durante el tiempo que permaneció en ese país, se dedicó a escribir lo que puede considerarse la primera historia de Centroamérica
Fray Antonio de Remesal nació en el pueblo gallego de Allariz, provincia de Orense, sin que se tengan noticas ciertas de su año de nacimiento.
Se sabe que Realizó estudios en la Universidad de Salamanca, donde adquiere gran conocimiento en latín, griego y hebreo, doctorándose en Teología. Ejerció como profesor en la Universidad de Alcalá. En 1593, ingresa en la Orden de Santo Domingo y, años más tarde, en 1613, viaja al Nuevo Mundo junto a su Alonso de Galdo quien había sido nombrado obispo de Comayagua, en el departamento del oeste de Honduras, a quien acompaña en su viaje de toma de posesión de su cargo en las nuevas tierras. Sin embargo, él se queda en el convento que los dominicos tienen en Santiago de los Caballeros de Guatemala, donde desempeña el cargo de confesor del gobernador de la provincia, conde de la Gomera.
Fue en esos años de estancia en Guatemala donde, debido al acceso que tuvo a la enorme cantidad de documentación que encontró en el convento de Santiago de los Caballeros, comenzó su obra como historiador. Bajo el título de Historia de la provincia de San Vicente de Chiapas y Guatemala o Historia General de las Indias Occidentales y particular de la Gobernación de Chiapa y Guatemala, abordó temas sobre la conquista de aquellas tierras por Pedro de Alvarado, además de información sobre las islas Filipinas, Oaxaca, próximo al territorio de Guatemala, sobre el Perú y sobre Bartolomé de las Casas. Se expone además el estado, las costumbres y la religión de Guatemala, en la época precolombina y en los primeros tiempos de la conquista española.
Debido a las muchas tensiones existentes en la época que le tocó vivir entre criollos y peninsulares, el clero regular y secular, así como a los conflictos entre la Audiencia y el Ayuntamiento, Remesal se creó muchas enemistades al tomar partido por el presidente de la Audiencia, Antonio Peraza Ayala Castilla, de quien era confesor. Especialmente contó con la aversión personal de Felipe Ruiz del Corral, deán de la Catedral de Guatemala y comisario del Santo Oficio, quien era apoyado por los criollos. Sus compañeros dominicos, por su parte, tampoco vieron con buenos ojos la exposición de sus conclusiones en las que desmentía alguno de sus logros
Remesal, fue expulsado de Guatemala a la muerte de su protector, teniendo que acabar su obra en Oaxaca. Regresó a España para hacerla publicar, viendo la luz en Madrid en el año 1619. El mismo llevó a Guatemala cinco cajas de ejemplares, pero fueron confiscados por Felipe Ruiz del Corral quien le acusaba de realizar duros ataques y difamaciones contra personajes e instituciones, impidiéndole la difusión del libro.
De vuelta a Guatemala fue encarcelado debido a su actitud arrogante que provocó la antipatía de religiosos y altos cargos. Finalmente fue desterrado. Después de pasar por varias provincias de la Nueva España se pierde su pista en Zacatecas desde donde envió una carta fechada en el año 1527.
Fuentes :
Los cronistas de indias, Natalia K. Denisova
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